Habitar nuevos espacios exige al psicoanálisis contemplar sus fundamentos para evitar desvíos. Las variantes de la cura según los avatares de las épocas deben articularse con las condiciones invariantes de la praxis. La política, que domina estrategia y táctica, maniobra desde la ética del Bien-Decir con el deseo del analista que es su operador.

Por Manuela Casares
“Lo que citamos de Lacan nos deja siempre la mitad del camino por hacer (…) porque, como tal, es completamente atonal. A ustedes toca poner allí el acento de verdad (…) encadenarlo en un lugar, saber hacer lazo”1
“Nadie parece percatarse de las contradicciones, tan flagrantes como permanentes, que son puestas en juego cada vez que intervienen los conceptos fundamentales” 2
El psicoanálisis no se reduce a un protocolo técnico. El consultorio como espacio que delimita un adentro y un afuera, crea un contexto virtual de enunciación que debe ser pensado desde la lógica del acto analítico como recurso adyacente al semblante que opera la presencia del analista como posición en el discurso del psicoanálisis. Depende de la creatividad de cada analista construir con cada parletre tal contexto de enunciación que no se reduzca a repetir el ritual 3. Saliendo de la modalidad que volvió ortodoxo el modo particular del analista Freud y que describió sin prescribirnos en consejos al médico. Autorizarse no es auto-ri (tuali) zar 4.
Para Lacan “un psicoanálisis, tipo o no, es la cura que se espera de un psicoanalista. Se trata ciertamente de un rigor en cierto modo ético”5 y depende del lazo del analista con el psicoanálisis, de hacerlo ex-sistir por medio de su lógica.
El analista en tanto “guardián de la sociedad” 6 restituye la instancia de lo simbólico en los conflictos imaginarios y tiene el deber de habitar otros espacios, físicos o virtuales.
Que «…el analista cura menos por lo que dice que por lo que es» 7, implica el lazo al lugar en el discurso analítico que ha de sostenerse más allá de lo contingente del contexto en que opere. Desde una posición de extimidad respecto de la sociedad por su posición de exterioridad con relación a los significantes amo y por el real que implica “no hay relación sexual”6. Es el rigor ético que nos autoriza.
Porque lo que interesa no es el cuerpo visual sino es el cuerpo pulsional, hecho de agujeros y bordes, sobre el cual la palabra se escribe. En tanto el lenguaje hace ser lo que no existe, y el ámbito del dispositivo existe exclusivamente por el poder del lenguaje.
Habitar con el dispositivo nuevos espacios exige contemplar los fundamentos para no desviarse. Las variantes de la cura según los avatares de las épocas deben entenderse en relación con las condiciones invariantes de la práctica: política, táctica y estrategia.
La política como condición invariante que domina estrategia y táctica opera desde la ética del Bien-Decir, orientada en el inconsciente, en su estructura. 8
Modelizar los dichos del sujeto, provocar la traducción de su narrativa, sintetizar, vaciar de sentido, circunscribiendo lo real del síntoma; devolviendo un decir preciso que interpele y al mismo tiempo le revele un saber como anzuelo que enganche al lazo social psicoanalítico. Que bien decir y saber leer se transfieran al analizante. 9
El analista es la persona a quien se le habla, pero responde desde el dispositivo analítico con el deseo del analista que es su operador. No se trata de su persona, sus preferencias tecnológicas o hábitos prácticos adquiridos. Si se confunde presencia del analista con presencialidad se desvanece el operador, entonces hay que reorientarse: el poder es de la cura no del analista.
“Que se atreva a decirlo él mismo, si todo lo que tiene que respondernos es que es un hombre” 7, refiere Lacan, y esto implica que lo que debe funcionar es el operador del deseo del analista, la posición de éste en el discurso como objeto a en tanto semblante.
Los fundamentos de la praxis como condiciones invariantes son el pedestal que soportan las variantes de la experiencia analítica que incita cada época. Psicoanálisis “lógico” lo llama Miller disolviendo la oposición puro/aplicado. Se trata de hacerlo ex-sistir desde la posición ética del Bien-Decir, ya que no hay psicoanálisis de un solo tipo si, como nos indica Lacan, lo devolvemos a su raíz universal, a su inserción en la experiencia de la palabra 5.
La Lic. María Manuela Casares es Psicoanalista y profesora (UBA). Es miembro de la Fundación Páremai Fractal , se desempeña como analista y en el equipo de ingresos. Trabajó como becaria en el Hospital General de Agudos Parmenio Piñero.
Notas y Bibliografía:
1- MILLER, J.A. (2000-01), El lugar y el lazo, Paidós, BB. AA., 2013
2-LACAN, J. (1984) El seminario. Libro 3. Las Psicosis. Madrid. Editorial Paidós.
3- GARCÍA, G. (2007). Fundamentos de La Clínica Analítica. Ed. Otium
4-LACAN, J. (1973). “Nota italiana”. En Otros escritos, Buenos Aires: Paidós, 2012.
5-LACAN, J. (1955) » Variantes de la cura tipo» En Escritos II. Ed. Siglo XX. Bs.As, 1986.
6-MILLER, J.A. (2005), La utilidad directa, Recuperado de http://www.xxviijornadasanuales.com/template.php?file=textos-de-orientacion/la-utilidad-directa.html
7-LACAN, J (1958) “La dirección de la cura y los principios de su poder” en Escritos Tomo 2. Ed. Siglo XXI. Edición 1987.
8-LACAN, J. (1970), “Televisión” En Otros escritos, Paidós, Bs. As., 2012
9-MILLER, J.A. (2011), Leer un síntoma Posteado por Blog AMP Recuperado de https://revistaenlaces.com.ar/archivos/enlaces_y/la_escuela/Leer_un_sintoma-J_A_Miller.pdf
-GRAN CONVERSACIÓN DE LA ESCUELA UNA. Domingo 20 de marzo de 2022. El psicoanálisis virtual Pg.18 en PDF.
-LACAN, J. (1964) “Acto de fundación” En Otros escritos, Buenos Aires, Paidós, 2012.
-LACAN, J. (1964-1965), El Seminario Los Cuatro Conceptos Fundamentales del Psicoanálisis, Buenos Aires: Paidós, 2005
-LAURENT, E. (2000). “El analista ciudadano” En Psicoanálisis y salud mental, Ed. Tres Haches, Buenos Aires, 2000.
-LAURENT, E. (2004). Principios rectores del acto analítico, Recuperado de http://ampblog2006.blogspot.com.ar/2006/09/principios-rectores-delacto-analtico.html
-MILLER, J. (2005). Introducción al método psicoanalítico (1a. ed., 4a. reimp.). Buenos Aires: Paidos.
-MILLER, J.A. (1987), “Acción de la estructura”. En Matemas I, Manantial, Buenos Aires.